Search
Categories
Nutrición y salud del suelo

¿Qué fuentes de nitrógeno (N) existen para fertilizar los cultivos?

¿Qué fuentes de nitrógeno (N) existen para fertilizar los cultivos?

Antes de fertilizar con nitrógeno (N) se deben conocer las necesidades del cultivo, el suelo, el clima y la forma en la que se va a aplicar el producto; tenga un panorama más claro con nuestra comparativa

Descargue contenido exclusivo adicional sin costo

El nitrógeno (N) es uno de los elementos más importantes para las plantas, forma parte de los tres macronutrientes, y muchos procesos metabólicos dependen de este. Debido a los altos precios de los fertilizantes que aportan nitrógeno (N), surge la pregunta: ¿qué tipos de fertilizantes nitrogenados hay en la región y cuáles son sus principales características?

Para empezar, el nitrógeno (N) existe en 4 formas químicas en la mayoría de los fertilizantes: nitrato, amoniaco, amonio y urea, pero las plantas lo absorben en las formas de nitrato y amonio.

1. Nitratos (NO3 - Disponible)

Los nitratos se disuelven en agua, se mueven en el suelo y son fácilmente absorbidos por las plantas cuando se encuentran al alcance de sus raíces, pero pueden lavarse o lixiviarse con el exceso de lluvia, especialmente en suelos con texturas gruesas o arenosas.

2. Amoniaco (NH3)

El amoniaco se presenta en forma de gas a presión atmosférica y se pierde en el aire. Pero puede ser comprimido como líquido y reaccionar con el agua del suelo para convertirse en amonio y ser utilizado por las plantas.

3. Amonio (NH4+ - Disponible)

El amonio es soluble en agua, este se adhiere a las partículas de arcilla y materia orgánica (similar a como un el hierro se adhiere a un imán), evitando la pérdida por lixiviación. Una vez en el suelo, los microorganismos convierten el amonio en nitrato. Este proceso se conoce como nitrificación.

Las condiciones ideales en el suelo para que se dé incluyen:

  • pH entre 7 – 8
  • Humedad a 50 % de su capacidad de retención
  • Temperatura de entre 15.5 °C y 37.7 °C.

4. Urea (NH2CONH2)

Es la forma de fertilizante nitrogenado que lleva un proceso antes de que pueda ser absorbido por las plantas. Las enzimas ureasas del suelo convierten la urea a amoniaco, el amoniaco reacciona con el agua y forma amonio que puede ser absorbido por la planta.

Al igual que los nitratos, la urea se disuelve en el agua del suelo y se puede lixiviar antes de que sea convertida a su forma amoniacal. La conversión de urea a amoniaco toma unas horas cuando la humedad del suelo es favorable para la planta. Una parte de la urea se volatilizará o escapará en forma de gas amoniaco al aire y otra parte reaccionará con la humedad y formará amonio, el cual no se moverá en el agua o se perderá en el aire. Una forma de evitar la volatilización de amoniaco proveniente de la urea es impregnarla con un inhibidor de ureasa, para evitar la hidrólisis de esta sobre la superficie del suelo. La urea sin hidrolizar se incorporará en el suelo al aplicar riego o caer lluvia, de forma que, al hidrolizarse bajo la superficie del mismo, el amoniaco producido se convierte en amonio, el cual es retenido por las arcillas.

Proceso de conversión del nitrógeno (N)

Comparativa de fertilizantes nitrogenados

Entonces, ¿cuál es la mejor forma de aportar nitrógeno (N)?

Tras conocer algunas propiedades del nitrógeno (N) en los fertilizantes se puede tomar una mejor decisión, dependiendo de las necesidades de nuestro cultivo, el suelo, el clima y la forma de aplicarlo. 

  • De las formas químicas del nitrógeno (N) que encontramos en los fertilizantes, solo 2 formas son asimilables por las plantas: nitrato y amonio. Se estima que el 80 % del nitrógeno (N) es absorbido por las plantas en forma de nitratos y en menor proporción como amonio y moléculas orgánicas.
  • La materia orgánica también juega un papel importante en el suelo, porque actúa como un reservorio para los nutrientes que forman enlaces y formas más estables en el suelo, mejoran la estructura, así como la retención e infiltración del agua.

Un repaso a las 4 C para una correcta fertilización

Para evitar pérdidas de nitrógeno (N) por lixiviación, volatilización y desnitrificación se deben tomar en cuenta el clima después de la fertilización y aplicar las 4 “C”.

Categories
Protección y bioestimulación

Cochinillas y hormigas, una amistad que daña cultivos de café

Cochinillas y hormigas, una amistad que daña cultivos de café

¿Sabía que los síntomas que causa este bicho harinoso se confunden con deficiencias nutricionales u otras plagas?

Descargue contenido exclusivo adicional sin costo

La cochinilla del café es una plaga que se encuentra en la base del tallo o las raíces de la planta y se alimenta de savia. Su presencia causa clorosis (condición anormal con hojas que varían entre verde pálido, amarillas o blanquecinas), marchitamiento, caída de hojas y estanca su crecimiento.

Este insecto también es conocido como piojo, palomilla o bicho harinoso. A simple vista, se ve como una masa algodonosa porque recubre su cuerpo con una sustancia cerosa.

La presencia de la cochinilla causa clorosis, marchitamiento, caída de hojas y estancamiento del crecimiento. (Foto: Archivo/Cambiagro)

Desarrollo de la cochinilla del café

Las cochinillas del café pasan por varias etapas ninfales relativamente inmóviles antes de convertirse en adultas. El macho adulto tiene una apariencia diferente a la hembra, con cuerpo esbelto y alas transparentes. Su único objetivo es fecundar a la hembra.

Luego de tres instares, se convierte en adulto con cuerpo esbelto y alas transparentes. (Ilustración: Arte/Cambiagro)

¿Qué tan estrecha es la relación entre la cochinilla del café y las hormigas?

La cochinilla del café tiene una cercana relación con las hormigas, conocida como simbiosis.

Las hormigas se alimentan de la savia que excretan las cochinillas y a cambio de este alimento las defienden del ataque de sus enemigos naturales, como las mariquitas.

Además, se ha observado que las hormigas transportan a las cochinillas de una planta a otra, contribuyendo a su dispersión en las plantaciones de café.

Las hormigas se alimentan de la savia que excretan las cochinillas y las defienden de sus enemigos. (Foto: Thang Cao/Pexels)

Las cochinillas se encuentran a profundidades de hasta 40 centímetros en el suelo y sus poblaciones suelen incrementarse cuando la humedad del suelo alcanza un 60 % a 80 %. Las plantas afectadas pueden distribuirse aisladamente por focos en la plantación. Sus síntomas pueden confundirse con otras plagas o incluso deficiencia de nutrientes, por lo que es importante establecer monitoreos desde la siembra hasta que se ha establecido el cultivo.

¿Cómo se hace un monitoreo en la plantación de café?

Se recomienda seleccionar aleatoriamente 30 plantas por lote y escarbar el suelo alrededor de la base. Según el tamaño de la planta, la textura del suelo y la época del año puede ser necesario profundizar entre 20 a 40 centímetros. Al encontrar la plaga se recomienda marcar el área, revisar y tratar las plantas ubicadas en un diámetro de 5 metros, debido a que es probable que también se encuentren infestadas, especialmente si hay hormigas.

¿Cómo se controla la cochinilla del café?

El coleóptero Cryptolaemus montrouzieri es un depredador natural de la cochinilla del café. (Foto: ResearchGate)

Debe de estar atento durante la producción de las plantas.

Cada una debe de estar sana, libres de plagas y enfermedades en la germinación y almácigo. En estas etapas es recomendable realizar monitoreos, al igual que en el establecimiento y en lotes productivos.

Si en su plantación encuentra la cochinilla del café, puede elegir u optar por los métodos de control descritos abajo.

  1. CONTROL CULTURAL
  • Utilizar plantas de café en calles y cercos como indicadoras para realizar los monitoreos de plagas sin dañar el cultivo. Además, revisar las plantas trampa una vez al mes durante los primeros 12 meses.
  • Si el cafetal está severamente infestado, lo mejor es retirarlo y sustituirlo con uno sano. Se recomienda retirar también el suelo y tratar el agujero con un producto químico.
  1. CONTROL FÍSICO O MECÁNICO
  • En almácigos se pueden limpiar las raíces retirando estos del suelo, luego sumergir la raíz en agua caliente (entre 45 y 48 °C) por 10 minutos. Cambiar la bolsa o maceta y sustituir con suelo estéril.
  1. CONTROL BIOLÓGICO
  • El coleóptero Cryptolaemus montrouzieri es un depredador de cochinillas algodonosas en su estado larval. Aunque su apariencia cuando es larva es muy similar a la cochinilla, esta se mueve más rápido y puede alcanzar el doble de su tamaño. Cuando es adulto su apariencia es similar a la de una tortolita o mariquita (negro y naranja, con textura vellosa).
  1. CONTROL QUÍMICO
  • Debido a que la cochinilla harinosa se encuentra principalmente enterrada en el suelo, es difícil controlar. Actualmente, la opción más efectiva es el control químico. Se recomienda el uso de insecticidas sistémicos aprobados en cada país y la rotación de ingredientes activos.
  • Algunos de los ingredientes activos utilizados en la región son:

    14,1 % Thiametoxam + 10,6 % Lambda-cyhalotrin.

    30 % Thiametoxam + 30 % Ciproconazol

    Diazinon o Clorpirifos.

únase a más de 35 mil agricultores que forman parte de nuestra comunidad

¡Suscríbase a nuestro boletín mensual GRATIS!