¿Qué sucedería si encontraran un compuesto natural que prometa transformar los métodos de protección en los cultivos de tomate?
Esto es lo que científicos del Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas (IBMCP), un centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universitat Politècnica de València (UPV) han logrado.
Según el estudio publicado en la revista Plant Physiology, el alfa-terpineol, un compuesto volátil, ha demostrado ser eficaz en la protección de las plantas contra la bacteria patógena Pseudomonas syringae, responsable de severos daños en diversos cultivos.
Julia Pérez-Pérez, doctoranda en la UPV y coautora del estudio, explica que, al igual que los seres humanos, las plantas tienen su propio sistema de comunicación y defensa.
“Emiten compuestos volátiles para alertar a sus vecinas del peligro y utilizan su sentido del olfato para percibir el mensaje,” indica la científica.
Este proceso de defensa es vital para la supervivencia de las plantas frente a ataques patógenos.
Interesante: Crean tomates morados con biotecnología
Para ilustrar este mecanismo, Pérez-Pérez detalla: “Imaginemos un campo de tomates donde la bacteria penetra en las hojas de una planta mediante los estomas (pequeños poros presentes en las hojas y tallos de las plantas)”.
A medida que se propaga, la planta se defiende de su ataque liberando al aire volátiles como el terpineol.
“Tanto otras partes de la propia planta como las vecinas ‘huelen’ este mensaje químico y cierran sus estomas, impidiendo la entrada del patógeno y protegiendo así el cultivo”, relata la experta.
Innovación en la resistencia
El equipo del IBMCP ya había patentado y licenciado anteriormente un compuesto volátil conocido como HB con una empresa química.
Este compuesto también protege a las plantas, y ahora, con el descubrimiento del terpineol, se suma un nuevo recurso para fortalecer la resistencia de los cultivos.
“Ambos compuestos forman parte de lo que llamamos el aroma de la resistencia, que simboliza el olor de la supervivencia para las plantas de tomate,” señala Pérez-Pérez.
La aplicación de estos compuestos es sencilla y económica.
Según el equipo del IBMCP, tanto el terpineol como el HB pueden ser pulverizados directamente sobre las plantas o aplicados mediante dispositivos difusores.
Este enfoque es efectivo, barato y respetuoso con el ambiente.
De acuerdo con Purificación Lisón, investigadora del IBMCP y profesora del Departamento de Biotecnología de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y del Medio Natural (ETSIAMN) de la UPV, hay mucho potencial en esta investigación.
“El uso de estos compuestos ofrece al sector agrícola una nueva alternativa económica, rápida y de gran efectividad para mejorar el rendimiento de un cultivo tan importante como es el tomate,” añade Lisón.
Beneficios ambientales y sostenibilidad
Aplicar estos compuestos en los tratamientos agrícolas también reduciría el uso de productos químicos en el campo.
“Esto no solo es beneficioso para el ambiente, sino que también promueve una agricultura más sostenible,” afirma María Pilar López, investigadora del IBMCP y profesora de la ETSIAMN.
Le preguntamos a la Inteligencia Artificial cómo sería la agricultura dentro de 100 años y esto respondió
Además de proteger contra las bacterias, esta estrategia natural podría servir como barrera protectora contra otras infecciones y la sequía, destacaron las investigadoras.
“Este descubrimiento del IBMCP representa un avance importante en la protección de cultivos, ofreciendo una solución natural, efectiva y respetuosa con el medio ambiente para los desafíos agrícolas actuales,” concluyen las investigadoras del IBMCP.
Este avance proporciona una nueva herramienta para los agricultores y sienta las bases para futuros desarrollos en el campo de la biotecnología agrícola, con el potencial de mejorar la resiliencia de los cultivos ante las adversidades ambientales y patógenas.
Ya leyó: Cómo responden las plantas ante la sequía
Un nuevo camino por recorrer
El descubrimiento del alfa-terpineol por el equipo del IBMCP representa un hito en la agricultura moderna.
A medida que se profundiza en el estudio y aplicación de estos compuestos volátiles, se abre un camino hacia prácticas agrícolas más sostenibles y eficaces.
La posibilidad de proteger los cultivos de tomate de manera natural y económica mejora la productividad, promoviendo un equilibrio más saludable.
Fuentes: Delegación en la Comunitat Valenciana / Gobierno de España / Consejo Superior de Investigaciones Científicas / Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas / Universitat Politècnica de València /Plant Physiology